Seguir leyendo 1.000 razones para viajar a La Palma La Palma es el destino ideal para vivir sin prisas y sin estrés, y descubrir así la impresionante belleza que proporcionan la naturaleza y sus pequeños pueblos. No hay excusas para no viajar la Isla Bonita. club renfe para CIT La Palma Más información: visitlapalma.es / lapalmacit.com Fotografiando por encima de las nubes, de Abián San Gil. Bosque de Los Tilos, de David Rosario. Observando las estrellas junto al volcán, de Alejandro de Paz. Piscinas de la Fajana, de Saúl Santos. Hace más de un año, La Palma era noticia mundial por la erupción de un volcán que afectó al 10% de su territorio. La naturaleza demostró todo su poder y colocó a la isla en el epicentro de todas las miradas. Ahora, la isla ha emprendido la recuperación de esa superficie sin perder ninguno de los 1.000 motivos que la llevan a ser denominada la Isla Bonita y destino ideal para unas vacaciones inolvidables. Un lugar de cuento. Pequeño, coqueto, atractivo, acogedor, tradicional... Con senderos que te llevarán de las más frondosas vegetaciones hasta el más potente y vigoroso volcán, asomándote al centro de la tierra y sintiendo su llamada. O caminos que te acercarán a lo más alto de la isla, por encima de las nubes, sintiendo el mundo a tus pies. La impresionante belleza de sus paisajes agrestes, variados y accidentados, bañados y definidos por una naturaleza pura, intacta y bien preservada, son un gran motivo para viajar hasta allí. La experiencias que puedes vivir en su territorio, sean por mar, aire o tierra, son otra razón para venir. Más de 700 kilómetros cuadrados que tienen mucho que ofrecer, vivir, explorar, sentir y descubrir. El término “naturaleza” adquiere en La Palma todo su significado. Activa tus sentidos, sana tu alma y revitaliza tu espíritu. Pero La Palma no solo es naturaleza. Es, también, gastronomía, patrimonio, aventuras, playas y un cielo nocturno próximo gracias a uno de los observatorios astronómicos más importantes del mundo: el del Roque de los Muchachos. Es el escenario privilegiado para todos aquellos que deseen conocer, disfrutar e integrarse en un lugar donde sentir algo muy especial: el efecto La Palma. Y es que la Isla Bonita acoge, arropa, da la bienvenida; logrando así que el que la visita se sienta como en casa y termine sus vacaciones con un suspiro y una promesa por cumplir: “Volveré”. Todo esto y mucho más, es La Palma, la Isla Bonita.