SLVJ Barcelona Granados 83 Green & Berry Lady Babka SLVJ Barcelona Se definen como “el lado salvaje de la gastronomía japo-nesa”. La actitud indómita les viene de un interiorismo audaz, una carta poco común —con variedad raras de cangrejo, especias picantes, fermentados y macera-dos, cocina al vacío— y la coctelería del premiado Borja Goikoetxea. La estrella de este restaurante con Fermín Azkue al frente es la robata, una parrilla japonesa que permite que los alimentos adquieran un aroma ahuma-do. Entre las especialidades, el snow crab, los carabine-ros, el wagyu con caviar o el bacalao negro. Enric Granados, 86. slvj.es Granados 83 A estas alturas, lo bueno de un hotel —silencio, calidez, detalles, localización, mascotas y una piscina idílica— se da por hecho. A partir de ahí aparece el carácter, lo que hace único a un alojamiento. El propietario de Granados 83 es Jordi Clos, egiptólogo y mecenas. Financia desde hace décadas excavaciones arqueológicas en Egipto, y el hotel presume de una buena colección de arte hindú y camboyano. Los mosaicos, las puertas labradas y las celosías casan sorprendentemente bien con la arquitec-tura industrial del edificio. Enric Granados, 83. hotelgranados83.com Green & Berry La premisa de esta cafetería vegetariana es sencilla: al con-trario de lo que a veces nos vende la industria alimentaria, la comida más deliciosa es la no procesada. Su carta ofrece tentempiés orgánicos sin azúcar, sin gluten y con materia prima de kilómetro cero; los envases son de madera, car-tón o papel. Los paseantes piden sobre todo zumos verdes (como los de remolacha, hinojo o apio), dulces veganos, lat-tes con espirulina o cúrcuma, leche de anacardos, granolas o protein balls con cacao y avellanas. “El tiempo ha demos-trado”, cuentan sus responsables, que “se puede mantener una dieta equilibrada sin la presencia de proteína animal”. Enric Granados, 153. greenandberry.es Lady Babka En este espacio con tres personalidades —deli, bis-trot y cafetería— todo está a la venta. Los babkas de canela, pistacho o manzana que bautizan el local (un bollo esponjoso con origen en Europa del Este); la selección de productos del cocinero francés Nicolas Vahé, e incluso los elementos y muebles que decoran el lugar, con un mix exquisito de estilos e influencias. En el llamativo escaparate, más parecido al de una joyería, también hay brioches, böreks (empanada turca de pasta filo) y pastelería clásica, que firma la chef Inés de Oriola-Cortada. La buena fama de su café se debe a la Modbar de La Marzocco que preside la sala. Enric Granados, 124. ladybabka.es